Un estudio piloto de la Universidad de Helsinki está adiestrando a perros ya entrenados como asistentes de diagnóstico médico para que reconozcan con el olfato la Covid-19, según informa Deutsche Welle.
A las pocas semanas, los primeros perros consiguieron diferenciar con precisión las muestras de orina de enfermos con Covid-19 de las muestras de personas sanas. La directora del grupo DogRisk, Anna Hielm-Björkman, resalta su «sólida experiencia en el entrenamiento de perros detectores de olores relacionados con enfermedades. Fue fantástico ver cuán rápido los perros localizaron el nuevo olor».
Los investigadores finlandeses preparan ahora un estudio aleatorio en el que los perros deberán oler una mayor cantidad de muestras de pacientes. Si los resultados de esta prueba son positivos, comenzarían a usarse las pruebas olfativas clínicamente.
Grupos investigadores de Reino Unido, Francia o Alemania que también se encuentran entrenando a perros rastreadores esperan que estos prometedores datos de Finlandia les ayuden. Científicos del Centro Alemán de Asistencia Canina (TARSQ) señalan que hasta ahora no tenían claro si era seguro realizar estas pruebas, ya que los virólogos de su país se lo desaconsejaron. «Después de todo, se sabe muy poco sobre el virus hasta ahora «, explica Luca Barrett, de TARSQ.
No se conocen por ahora qué sustancias dan ese olor característico a la orina, pero los perros, con sus órganos olfativos altamente sensibles, son capaces de detectarlo. Los perros también tienen capacidad para detectar otras enfermedades como algunos tipos de cáncer o el Parkinson. Es importante destacar que la tasa de aciertos debe ser lo más elevada posible. También son capaces de detectar la malaria, pero con una tasa de acierto demasiado baja, solo la detectan en 7 de cada 10 personas.
Cabe señalar como inconvenientes que el número de este tipo de perros no es muy elevado y además sobre ellos hay bastante escepticismo entre los médicos tradicionales y las compañías de seguros.