Los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y de Estados Unidos, Barack Obama, acordaron hoy reforzar el alto el fuego en Siria, donde los combates se han recrudecido en los últimos días, especialmente en torno a la ciudad de Alepo.
«Con ese fin se adoptarán nuevas medidas para reaccionar de manera operativa a las violaciones del alto el fuego», en vigor desde finales de febrero, informó el Kremlin en un comunicado tras la conversación telefónica mantenida por ambos mandatarios.