El agujero sin precedentes en la capa de ozono estratosférico sobre el Ártico, registrado en las últimas semanas, se ha cerrado repentinamente debido a la irrupción de aire rico en ozono por la división del vórtice polar, un ciclón persistente a gran escala en la zona ubicado en la media y alta troposfera y la estratosfera.
«El agujero de ozono sin precedentes del Hemisferio Norte en 2020 ha llegado a su fin. El vórtice polar se ha dividido, permitiendo la irrupción de aire rico en ozono en el Ártico» ha confirmado Copernicus, servicio de monitorización de la atmósfera.