Hace un año, el astrónomo Joe Rao descubrió que el vuelo 780 de Alaska Airlines de Anchorage a Honolulu prácticamente coincidiría con el eclipse solar del pasado día 9. Solo unos minutos lo separaban para poder disfrutar del fenómeno completo desde el aire. Pero Rao quería disfrutarlo entero.
Lejos de desesperar, el astrónomo llamó a la aerolínea explicando su problema y solicitó cambiar el horario del vuelo, retrasándolo 25 minutos, para optimizar el eclipse. Alaska Airlines no dudó y lo modificó para que el científico y docenas de astrónomos más pudieran disfrutar de todo el fenómeno.
«Es un gesto increíble por parte de la compañía», comenta Mike Kentrianakis, director del proyecto para la American Astronomical Society, que viajó también en el mismo vuelo. «Alaska Airlines no solo se encarga de llevar pasajeros de un punto A a uno B, sino que también quieren conectar con sus clientes y darles la experiencia de vuelo más emocionante».
Rao y Kentrianakis forman parte de una comunidad muy unida de científicos que se dedican a recorrer el mundo «cazando» eclipses. «Un eclipse solar es uno de los fenómenos naturales más espectaculares que el ser humano puede ver en su vida», comenta Bob Stephens, otro astrónomo aficionado. «Por eso nos dedicamos a perseguirlos».
Los astrónomos grabaron en todo momento el eclipse, creando el siguiente y fascinante vídeo.
Foto: Alaska Airlines