El artesano chocolatero portugués Daniel Marcelino Gomes, natural de la ciudad lusa de Leiria, ha conquistado los paladares de las personas más ricas del mundo gracias a la creación de un bombón elaborado con oro de 23 quilates, que cuesta 7.728 euros y que «es el más caro del mundo».
«Es una gran sorpresa para las personas cuando lo ven», aseguró hoy en declaraciones Efe, ya que es una pieza muy pequeña y vale mucho dinero, comentó.