Raras tortugas marinas o tiburones de arrecife son algunas de las especies amenazadas que han sido avistadas en las últimas semanas en las costas de Tailandia, vacías de turistas por la COVID-19.
A principios de abril, Tailandia, que el año pasado atrajo a cerca de 40 millones de turistas, cerró sus fronteras a la llegada de visitantes extranjeros.