El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha afirmado este lunes que más de dos millones de sirios residentes en la localidad de Alepo (norte) y sus alrededores vuelven a contar con agua potable, tras 48 días sin suministro.
La agencia ha detallado que la planta de tratamiento de Al Jafsé, que extrae agua del río Éufrates para producir un promedio de 400 millones de litros de agua limpia cada día, fue cerrada deliberadamente el 16 de enero, si bien ha vuelto a operar este fin de semana.
UNICEF ha dicho que la planta, el único recurso de agua potable para la ciudad, garantiza el suministro de más de un millón de niños, lamentando que el agua haya situdo utilizado como un arma de guerra por las partes en conflicto.
Por su parte, el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, ha subrayado en un mensaje que la guerra está teniendo un efecto particularmente grave en las mujeres.
De Mistura ha manifestado que las mujeres deben tener derecho a participar en el proceso político y de negociación orquestado por la ONU, para que sus voces sean escuchadas.
La oposición siria decidirá a finales de esta semana si asiste a la próxima ronda de conversaciones de paz en Ginebra y se ha quejado a la ONU de que Rusia ha seguido con sus bombardeos aéreos pese a la tregua, según ha indicado este lunes el coordinador de la oposición, Riad Hiyab.
El pasado 22 de febrero, Estados Unidos y Rusia publicaron una declaración conjunta que establece un alto el fuego en Siria a partir de la medianoche del 26 al 27 de febrero.
Además, la tregua está avalada por la Resolución 2268 del Consejo de Seguridad de la ONU. La medida no se aplica a los grupos declarados terroristas por la ONU, como el Estado Islámico y el Frente Al Nusra.
Recomendamos: 700 millones de euros para los refugiados
Te puede interesar: Alto en fuego en Siria, primer paso para la paz